Comienza el curso. Un curso diferente, extraño que nos reta a cambiar muchas de las cosas que teníamos previsto. Una de las cosas que más preocupó a finales junio o julio supe que no podría trabar en grupos. Es decir, habría que mantenerse la distancia de seguridad, por eso, de manera física no podría estar en grupos colaborativos, como levaba trabajando desde hacía años. Así por tanto la maquinaria se pone en marcha para trabajar en grupos, pero cada cual, desde su lugar en la clase.
