Esta semana ha tocado probar el kahoot con todos los grupos, constituyendo una experiencia muy interesante de gamificación de la clase. La propuesta se realizó en dos sesiones; una primera de búsqueda o estudio del tema y la segunda con la aplicación viendo lo que habíamos aprendido. Puntualmente he utilizado la aplicación como repaso de algún tema y la experiencia siempre ha sido muy positiva. El único inconveniente, los problemas técnicos.
¿Qué es Kahoot?
La aplicación Kahoot es una herramienta móvil que permite la elaboración de preguntas o cuestionarios para evaluar jugando. El profesor o los alumnos crean concursos donde los concursantes son los estudiantes. Es muy sencilla de usar. Entrando en la página o descargando la aplicación, que es muy ligera, mediante un número que identifica el juego, los concursantes participan respondiendo a las preguntas en su dispositivo móvil que se configura como si fuera un mando.
Las ventajas que tiene la aplicación en el entorno educativo es la motivación extra que da a los alumnos por aprender y conocer las preguntas. En el uso durante esta semana he comprobado que, incluso los alumnos que normalmente les cuesta participar, estaban muy motivados con el juego.
He utilizado el Kahoot de dos maneras en clase: la primera pidiéndole a los alumnos que, al terminar una lección, elaboren un grupo de preguntas y sus respuestas correctas. Cada grupo cooperativo debe elaborar al menos cuatro preguntas (una por cada estudiante) Las preguntas luego se pasan al juego y en la siguiente sesión realizamos la actividad. La otra manera de jugar, que es la que he usado en esta última ocasión, cada grupo ha tenido que explicar a la clase un aspecto de un tema que han trabajado previamente, debiendo estar todos muy atentos en clase, porque de lo expuesto salen las preguntas para el juego. En esta última modalidad, al terminar la exposición de cada grupo, realizo un repaso de lo fundamental a modo de corrección para que todos tengan claro lo fundamental de lo explicado.
El gran inconveniente del Kahoot en los centros públicos es el problema de la cobertura móvil y no disponer de dispositivos en todos los grupos cooperativos cosa que he solventado en ocasiones, prestando mi móvil o tablet a los estudiantes para que puedan jugar ya que el concurso ha sido cooperativo de manera que en cada grupo base debía existir un móvil para responder a las preguntas.
Con todo, la experiencia ha sido muy interesante y motivadora. La participación e implicación del alumnado ha sido ejemplar y los resultados realmente buenos en general, sobrepasando un acierto de más del 60% de las preguntas planteadas en casi todos los grupos.